Psicomotricidad infantil – Lateralidad
La psicomotricidad infantil – lateralidad, es la técnica que ayuda a niños y niñas a ser capaces de dominar sus movimientos corporales de una forma activa, así como a mejorar su relación y comunicación con los demás. El principal beneficio que tiene la psicomotricidad en la etapa infantil es el fortalecimiento de la salud física y mental del escolar.
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Concepto de Psicomotricidad infantil – Lateralidad
El cuerpo humano se caracteriza por la presencia de partes pares y globalmente simétricas. Pero junto a esa simetría anatómica existe una asimetría funcional por la que usamos preferentemente segmentos de uno u otro costado corporal.
El proceso de lateralización es una etapa más del proceso de maduración del sistema nervioso, por el que la dominancia de un lado del cuerpo sobre el otro va a depender del predominio de uno u otro hemisferio. En este sentido se considera una persona diestra cuando hay predominancia del hemisferio izquierdo, y una persona zurda, cuando la predominancia es del hemisferio derecho.
La lateralidad es pues el predominio funcional de un lado del cuerpo sobre otro y se manifiesta en la preferencia de servirnos selectivamente de un miembro u órgano determinado (mano, pie, ojo, oído), para realizar actividades concretas.
Otro factor a tener en cuenta cuando nos referimos a la lateralidad, es su relación con el espacio. El niño va a ir adoptando una preferencia funcional que le va a permitir diferenciar dónde va a estar la derecha y la izquierda con relación a su cuerpo, y más tarde en relación al compañero, lo que le va a permitir conformar la base de la orientación y la estructuración espacial.

Factores que condicionan la lateralidad y la Psicomotricidad infantil
Existen varias teorías que intentan explicar porqué determinados individuos son diestros o zurdos. Según Rigal (1987), ninguna de ellas son absolutas, porque debemos aceptar que la determinación de la lateralidad va a ser afectada por más de una causa.
Teniendo en cuenta las aportaciones de este autor y de otros podemos establecer los siguientes factores:
Factores neuro fisiológicos: basada en la existencia de dos hemisferios cerebrales y la predominancia de uno sobre el otro.
Factores genéticos: la lateralidad de los padres condiciona la de sus hijos.
Factores sociales:
-Religiosos y políticos: han condicionado la lateralidad, la zurdería estaba mal vista.
-El ambiente familiar: la manera de coger al bebé para amamantarlo o mecerlo; la forma de situarlo ante los objetos, las conductas modelo que los bebés imitan de sus padres… pueden condicionar su lateralidad.
Tipos de lateralidad – Psicomotricidad infantil
Dependiendo de la predominancia lateral que presenten los individuos en el ámbito ocular, auditivo, manual y pédico, existen diferentes tipos de lateralidad según Ortega y Blázquez (1982):
- Dextralidad: predominio de ojo, mano, pie y oído derecho.
- Zurdería: predominio de ojo, mano, pie y oído izquierdo.
- Ambidextrismo: no existe una manifiesta dominancia manual (suele darse en los inicios de la adquisición del proceso de lateralización).
- Lateralidad cruzada o mixta: donde la mano, pie, ojo u oído dominante, no corresponde al mismo costado corporal.
- Lateralidad contrariada o invertida: donde la lateralidad innata del niño, se ha contrariado por los aprendizajes.
Existen numerosas pruebas exploratorias para determinarla; todas ellas buscan la expresión de la dominancia funcional a través de la ejercitación de cada órgano o miembro en una serie de actuaciones concretas.
Una prueba muy fiable es el Test de Harris que consiste en las siguientes actividades:
- Predominio en extremidades superiores: imitar estas acciones:
- Lanzar un balón.
- Dar cuerda a un despertador.
- Clavar una puntilla.
- Cepillarse los dientes
- Peinarse
- Girar el pomo de una puerta
- Sonarse
- Utilizar las tijeras
- Cortar con un cuchillo
- Escribir.
- Predominio Visual:
- Mirar por un cartón con un agujero dentro.
- Mirar por un telescopio.
- Apuntar con una escopeta (de niño).
- Predominio en extremidades inferiores:
- Juego de la rayuela
- Chutar una pelota.
Si todas las pruebas se resuelven con la mano, ojo y pie, derecho o izquierdo, en este caso la lateralidad está definida. Si por el contrario, no todas las pruebas se resuelven con la misma mano, ojo y pie, la lateralidad estará poco afirmada. Si las actividades se realizan con lados distintos según se trate de mano, ojo o pie, la lateralidad estará cruzada.
4. Evolución de la lateralidad
La mayoría de los autores opinan que es difícil hacer un diagnóstico de la lateralidad antes de los cinco años. Según Le Boulch (1983), trataremos de sintetizar cómo es la evolución de la lateralidad:
- Periodo de 0-3años:
- En las primeras semanas de vida ya es posible observar una futura dominancia a través del Reflejo Tónico Cervical (tendido supino con la cabeza girada a un lado, se obtiene una extensión del miembro superior del lado al que gira la cabeza y una flexión más pronunciada del lado opuesto, recuerda la postura de un esgrimista).
- Hasta el año sigue con una serie de manipulaciones y movimientos unilaterales y bilaterales y no hay una dominancia clara.
- La preferencia lateral aparece al año y medio cuando el niño comienza a coger objetos diversos.
- Entre los dos y tres años, puede haber un periodo de inestabilidad. A nivel de piernas esta inestabilidad se acentúa más, debido a que hay un uso equivalente de ambas, por ejemplo al andar.

✓ Periodo de 3-9años:
- A partir de los 4 años, se acepta la definición de la lateralidad.
- Entre los cinco y seis años, el niño adquiere los conceptos de derecha e izquierda en su propio cuerpo, basándose en su dominancia lateral.
- A partir de los ocho años, aunque pueda existir algún periodo de inestabilidad, deberá quedar consolidada la lateralidad. Es capaz de reconocer derecha e izquierda en los demás.
Trastornos de la lateralidad
Los trastornos de la lateralidad se van a producir, cuando se trata erróneamente de cambiar la lateralidad de un individuo, porque esto le va a romper todos sus esquemas de acción, repercutiendo sobre todo en retrasos a nivel escolar y motriz.
En el ámbito escolar, el mayor problema lo vamos a encontrar en la escritura, ya que el niño va a tener dificultades para coger el lápiz y manejarlo, teniendo así una escritura deficiente y poco legible.
Los trastornos a nivel motriz se reflejan en:
- Actividades que requieran el manejo de móviles, porque se realizan de forma defectuosa.
- Actividades en las que se utilice una pierna de batida para impulsión, dándose casos en los que los individuos no saben que pierna utilizar.
- Actividades que requieren giros, porque éstos suelen realizarse hacia el lado dominante y, si no se tiene claro se pueden presentar situaciones de confusión.

Actividades para el desarrollo de la lateralidad
Le Boulch considera que en la educación de la lateralidad inicialmente no debemos de imponer la realización de ejercicios con un lado u otro, pero posteriormente, cuando se haya definido la lateralidad, es conveniente reforzar el lado dominante.
En general todos los ejercicios en donde se utiliza una parte lateral del cuerpo, tanto a nivel de miembros superiores como inferiores, resultan idóneos para afirmar la lateralidad:
Ejercicios de coordinaciónóculo-manual:
- Lanzamiento de pelotas. Punterías.
- Golpeos con las manos.
- Pases.
- Lanzamientos de objetos: disco volador
- Malabares.
- Conducir aros.
- Señalar y nombrar objetos a la derecha o a la izquierda.
Ejercicios de coordinaciónóculo-pédica:
- Golpear el balón con el pie.
- Toques malabares con el pie.
- Conducción de balón.
- Saltar a pata coja.
- Saltos con batida a un pie tanto en plano horizontal como vertical (tijera).
- Puntería de pateos.